La Guardia Civil instruye diligencias en calidad de investigado a G.M.C., vecino de Mairena del Acor, por un supuesto delito de Maltrato Animal.

La investigación se inicia cuando la Guardia Civil tiene conocimiento de la existencia de animales en la azotea y el patio de una vivienda de una calle de la localidad, en la que su titular no suele estar presente. Una vez en el lugar, los agentes observan varios perros de raza galgo español, en los espacios exteriores de una vivienda urbana, en estado de inanición, colmados de parásitos e incluso uno muerto, al que el resto había devorado casi en su totalidad. Los animales carecían de agua y alimentos.

El lugar concreto se encontraba en pésimas condiciones higiénicas, estaba cubierto de excrementos de animal y la zona desprendía un olor nauseabundo. Desde otras propiedades se observa el precario estado del lugar y de los animales.
Una vez localizado y puesta en contacto con el dueño de la vivienda y responsable de los canes, la Guardia Civil del Puesto Principal de los Alcores procede a la lectura de derechos, en calidad de investigado por un delito de Maltrato Animal.

Los cuatro canes han pasado a ser custodiados en las dependencias de una asociación privada de defensa animal, a la espera de la decisión judicial.